EL HIJO DEL CAMPECHANO

Madrid pierde, el Príncipe gana
Antoni Gutiérrez-Rubí

Sin duda, la intervención del Príncipe de Asturias ha sido una pieza memorable y destacable, aunque no haya podido ser decisiva. Si se ha perdido, no ha sido por él. Su profesionalidad en el discurso final ha demostrado que España tiene en su figura una apuesta de futuro fundamental.

Comentarios

Qué previsible es todo es este país. Y qué poco valiosa es la objetividad y la coherencia. Este artículo, sincero, profesional y valiente, contra el pensamiento dominante -que ni siquiera El País se atreve a dar demasiado recorrido- genera el desprecio al autor que, lean, no es periodista (un periodista no se atrevería a decir lo que piensa en este tema sin contar con la línea editorial) sino un experto en aquello de lo que habla en el artículo. De qué va este texto? De la comunicación del príncipe. No de monarquía, ni de corrupción, ni de política, ni del PP. Es muy pobre argumentar con otros asuntos distintos al que se propone para descalificar un trabajo bien hecho.
El príncipe lo ha hecho bien, y sus asesores también, que esa es su misión. Y no nos hace más monárquicos reconocerlo, sino más honrados.

claro que el príncipe gana, no lo hacen siempre? él y su familia, mientras roban en tu educación, tu salud, tu felicidad, tu futuro ellos ríen a carcajadas de nosotros y nosotros que hacemos? aplaudimos

Pues sí, el Príncipe ha estado muy pero que muy bien. Hasta nos hemos olvidado de la rastra de las aficiones de su padre y el embrollo de su cuñado. El resto, en su línea. Se quiere dar aspecto de seriedad que, sin duda la hay, pero muy maquillada y maltrecha. Muchos engranajes del sistema en general fallan y se desperdicia mucho dinero por estar mal administrado, no porque no lo tengamos. Riqueza hay, pero mal repartida. Lo he vivido y experimentado durante 17 años fuera de España, próxima a un mundo paralelo en muchos aspectos. El sistema educativo falla y de eso han dado una muestra magistral la alcaldesa, el presidente y el presidente. Qué pena, con lo que valemos. Tendríamos que querernos más y ser conscientes de lo que realmente valemos y de nuestro potencial. Otros países se quieren mucho a sí mismos y por eso recogen frutos. A ver si aprendemos de una vez.

Atención Atención: Han vuelto las patéticas demostraciones de servilismo monárquico!! Bien escrito!!! Como un buen súbdito, haciendo méritos para progresar en la corte!!!

El dinero que se ha invertido en la educación y preparación del Príncipe, tiene sus frutos, no se podía esperar menos, sino que me devuelvan el dinero.
No ha hecho ni más ni menos que hacer su trabajo, defender, en este caso, la candidatura del país que representa, no creo que sea tan difícil.
Pero la cuestión es, el resto de representantes, han estado a la altura?
Esta España bananera, así es como hemos quedado ante los ojos del mundo.
Qué vergüenza oir hablar a la Sra. Botella y Sr. Rajoy, solo nos hubiera faltado ver a la Sra. Barberá dando botes ante el COI, cosa muy habitual en ella.
Se han equivocado en el discurso y eso ha sido muy evidente como lo han defendido, un error que nos pasará factura.

Lo mínimo que puede hacer alguien que desde la cuna ha sido educado con cargo a los presupuestos del Estado para ser rey es hablar decentemente por lo menos un par de idiomas extranjeros y denotar cierta cultura y porte. No me parece un mérito extraordinario la actividad de don Felipe, es más, para eso tiene su salario y en eso consiste su trabajo de representación. Todo ello sin menoscabo del ejército de asesores, ayudantes y especialistas de todo tipo que se se lo ponen todo en bandeja. Nadie se gana la confianza de una asamblea por su cara bonita. Y seguramente ha pesado decisivamente el lamentable historial de corrupción en todos los ámbitos de la sociedad española, desde el entorno de la mas alta magistratura del país, pasando por el partidos del Gobierno, el partido de la oposición, políticos de todo pelaje, banqueros y jueces que por ejemplo ordenan destruir pruebas de dopaje deportivo. En fin, que buena o mala la actuación del príncipe, bueno o malo el inglés de la Sra Aznar, que tampoco ayuda, es difícil premiar a un país con ese historial reciente, además con el paupérrimo argumento de la lagrimita de que España lo necesita. Espero que alguien mas reflexione y finiquite el estado de corrupción que ha prevalecido durante décadas.

Para qué el mal gusto al comentar lo manifestado por el periodista sobre una competencia que puede ser dignificante, si se trata de buscar la superación de momentos difíciles? Lo que ahora tiene que hacer el pueblo español es reconocer que tiene que enfrentar la corrupción que allí se vive. Es horrible lo del PP y el caso Bárcenas, lo de los ERE para el PSOE, lo del dopaje, el accidente por el diseño cuestionable de una vía. El callar como lo hace el Presidente actual del gobierno NO ES FORMA DE ENFRENTAR LOS ERRORES. Éstos sólo se superan cuando se reconocen con honestidad, para poder empezar a corregirlos.Ahora, claroque hay una verdadera distancia entre el señor Rajoy y el Príncipe y por fortuna para España, el descendiente Borbón va muy, pero muy adelante y eso que no soy afecto a monarquías.

http://blogs.elpais.com/micropolitica/2013/09/madrid-pierde-el-pr%C3%ADncipe-gana.html

Opiniones dispares para el hijo del campechano